Los machos lucen sobre los hombros una llamativa y larga melena. Tienen un pelaje plateado con tonos claros en el vientre. Las hembras tienen pelaje también plateado con tonos marrones acentuados en los flancos, derivando hasta el crema pálido en el vientre. Los cachorros nacen con pelo negro, sólo algunos pocos presentan un color crema apagado o blanquecino.

Estos animales se encuentran en playas como las de las Islas Shetland de Sur, y en general en muchas islas sub-antárticas. Entre 1819 y 1825 sufrieron una cacería devastadora que los llevó a la extinción en toda la zona, a pesar de ello pudo recuperarse la población, probablemente por animales procedentes de las islas Georgias del Sur, donde existían colonias inaccesibles para los cazadores.

Los lobos marinos son sumamente ágiles tanto en tierra como en el mar; pueden caminar y correr con rápidos movimientos, incluso sobre superficies pedregosas, apoyándose y desplazándose sobre sus aletas delanteras. El cuerpo del lobo marino dispone de una capa de grasa de unos 2,5 cm. que le hace impermeable; en su exterior presenta pelos toscos. Parece brillante y húmedo cuando emerge del agua, pero con unas vigorosas sacudidas se libera fácilmente de ella.

Al igual que ocurre con el resto de los otáridos, el Lobo fino antártico forma colonias llamadas "harenes" donde se realiza la reproducción. Por el mes de septiembre el macho adulto acota previamente el territorio de costa donde nacerán las crías. Las luchas y disputas con los machos vecinos por el control de la zona y el dominio sobre las hembras puede ser larga y muy violenta, excepcionalmente algunos machos logran retener en los harenes hasta 30 hembras. Un mes más tarde las hembras preñadas se reúnen en los harenes marcados, generalmente en grupos de cuatro o cinco. Las hembras maduran sexualmente antes que los machos cuando alcanzan los 3 años; los machos aunque llegan a la madurez sexual a los 4 años, solo son capaces de mantener harenes a los 6 o 7 años de edad.

Los cachorros nacen en noviembre y diciembre cubiertos de una piel negra y lanosa que mantienen durante todo el verano. La alimentación de los cachorros dura unos 2-3 meses, este periodo es mucho más largo que en otras especies. Para mantener el suministro de leche, las madres vuelven al mar durante el periodo de lactancia en busca de alimento; mientras están lejos, los cachorros se esconden en áreas protegidas y se mantienen en silencio. Cuando la madre regresa, las crías emiten una llamada para ser detectadas con un sonido parecido al ladrido de un perro. Se alimenta a base de peces y crustáceos.