Democracia |
Octavo básico: Unidad 2:
Procesos políticos que marcaron el siglo XX. Temas políticos del siglo XX:
Etimología
La palabra " democracia" proviene de los vocablos griegos "demos" y " kratos" , traducidos habitualmente como "pueblo" y "gobierno" o "poder", respectivamente. La traducción tradicional entonces resulta en "gobierno del pueblo" o "poder del pueblo". Sin embargo, la significación etimológica del término es mucho más compleja.
El término "demos" parece haber sido un neologismo derivado de la fusión de las palabras demiurgos y geomoros.
El historiador Plutarco señalaba que los geomoros y demiurgos eran junto a los eupátridas las tres clases en las que Teseo dividió a la población libre del Ática (adicionalmente, la población estaba integrada también por los metecos, los esclavos y las mujeres). Los eupátridas eran los nobles, los demiurgos eran los artesanos y los geomoros eran los campesinos. Estos dos últimos grupos, " en creciente oposición a la nobleza, formaron el demos" .
Hitler y la democracia
Un equívoco histórico muy generalizado es la creencia de que Adolfo Hitler fue elegido democráticamente como presidente de la República de Weimar en 1933.
Von Hindenburg
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Los hechos históricos son que en 1932 Hitler perdió las elecciones presidenciales frente a Paul von Hindenburg, quien obtuvo el 53 por ciento frente al 36 por ciento de aquel. En las elecciones parlamentarias de julio del mismo año, el Partido Nazi de Hitler alcanza 230 escaños que lo volvieron el más numeroso.
En ese momento el presidente Von Hindenburg le ofrece a Hitler la vicecancillería, pero este la rechaza; sin embargo, los nazis concretan una alianza con las fuerzas de centro en el gobierno, y como resultado de ello Hermann Goering, uno de los principales colaboradores de Hitler, fue elegido presidente del parlamento (Reichstag).
En noviembre de 1932 hubo nuevas elecciones parlamentarias en las que el Partido Nazi perdió dos millones de votos y el bloque se redujo a 196 escaños. La crisis electoral de la alianza de centro y derecha llevó a la renuncia del canciller Franz von Papen. Von Hindenburg piensa entonces en ofrecerle la cancillería a Hitler, pero ante la oposición del ejército nombra canciller al general Kurt von Schleicher. Este logra debilitar más aún a Hitler quien sufre una nueva derrota electoral en las elecciones regionales de Turingia.
En esa situación las bancadas socialistas y comunistas quitan su apoyo a Schleicher, lo que lo obliga a renunciar en enero de 1933. Hindenburg nuevamente oscila entre von Papen y Hitler, decidiéndose por el primero. Pero no llega a asumir porque las SA (Sturmabteilung), la fuerza paramilitar del nazismo que dirigía Ernst Röhm, toman el control militar de Berlín.
¿Voto libre e informado?
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En esas condiciones, Von Hindenburg nombró canciller a Hitler el 30 de enero de 1933. Hitler entonces disolvió el Parlamento y llamó elecciones para el 5 de marzo. En el intertanto, Hitler mandó incendiar el Parlamento, anuló las garantías constitucionales, impuso la pena de muerte para aplicarla a aquellos que realizaran "alteraciones graves de la paz", y colocó a sus hombres en la conducción del ejército. En esas condiciones ya dictatoriales se realizaron las elecciones en las que obtuvo el 44 por ciento del Parlamento, número que tampoco le otorgó la mayoría. Para entonces la dictadura ya se había instalado definitivamente, y el Parlamento no volvió a tener influencia política.
Lo primero a señalar es que en todo caso se trataría de un ejemplo de la "tiranía de una minoría", ya que Hitler nunca accedió al poder por medio de elecciones. Además, algunos sistemas electorales dan el poder a la persona o facción que lidera una minoría, pero muchos otros no lo hubieran permitido, por lo que el ascenso de Hitler al poder debe enmarcarse como un golpe de estado.
También hay que tener en cuenta que la constitución vigente en aquel contexto permitía el establecimiento de poderes dictatoriales y la suspensión de la mayoría de la propia constitución en caso de "emergencia", sin ningún tipo de votación, algo impensable en la mayoría de las democracias modernas. De cualquier forma, es importante señalar que las violaciones a los derechos humanos más grandes tuvieron lugar después de que Hitler aboliera por completo el sistema democrático.
Podría concluirse que la democracia que permitió el ascenso de Hitler no estaba correctamente blindada contra su conversión en una dictadura, como sí lo están las democracias modernas.
Estabilidad política y guerras
La democracia es un sistema en el que la ciudadanía puede quitar de sus puestos a los gobernantes sin tener que cambiar toda la base legal del gobierno.
En este sentido, la democracia reduce la inestabilidad política y asegura a los ciudadanos que por mucho que disientan de las políticas del gobierno en un momento dado, siempre tendrán una oportunidad regular de cambiar a quienes gobiernan, o incluso de cambiar directamente las políticas con las cuales no están de acuerdo, en los casos en que la democracia representativa se combine con la democracia directa.
La mayoría de la gente coincide en que esto es preferible a un sistema en el que los cambios políticos se llevan a cabo por medio de la violencia, lo que desemboca la mayoría de las veces en un golpe de estado o una guerra civil.
Por otra parte, las evidencias empíricas parecen mostrar que dos democracias nunca o casi nunca han entrado en una guerra.
Un ejemplo es un estudio de todas las guerras sucedidas desde 1816 hasta 1991, en el que se definió "guerra" como acción militar con más de mil bajas en combate y "democracia" como un estado con más de dos tercios de la población masculina con derecho a voto. El estudio encontró 198 guerras entre "no-democracias", 155 guerras entre democracias y no-democracias, y ninguna guerra entre democracias. De todas formas, este planteamiento sigue suscitando polémica y está sujeto a una gran investigación académica y debate.
Cuando la guerra se produce, las democracias a veces responden con lentitud a causa de los requisitos legales y burocráticos necesarios para tomar decisiones.
En una democracia normalmente el parlamento debe aprobar una declaración de guerra antes de comenzar o incorporarse a las hostilidades, aunque algunas veces el ejecutivo tiene poder para tomar la iniciativa simplemente informando al parlamento de la decisión.
Además, si se instituye un alistamiento de cara a la eventual guerra, la ciudadanía puede protestar. Las monarquías y dictaduras en teoría pueden actuar inmediatamente por no estar sujetas al funcionamiento legal y burocrático de las democracias, pero a menudo no lo hacen, e históricamente las monarquías también realizaban declaraciones de guerra. A pesar de todo lo comentado, o quizá a causa de ello, históricamente las democracias han sido capaces de mantener su seguridad.
Ver: Democracia: Mapa conceptual
Fuente Internet:
http://es.wikipedia.org/wiki/Democracia