Concepto de revolución |
Las revoluciones son una forma particular de movimiento social, mediante las cuales algunos sectores subalternos intentan destruir los aspectos centrales del orden vigente, al que consideran injusto, para construir uno nuevo.
La “Revolución de los claveles”, Portugal, 25 de abril de 1974. |
En términos generales, las revoluciones poseen determinadas características que las distinguen de otras acciones colectivas, como las revueltas o las rebeliones. Para que una acción colectiva sea considerada revolución deben estar presentes los siguientes elementos:
• Crisis del sistema de dominación: Las revoluciones se producen cuando los sectores dominantes tienen dificultades para continuar ejerciendo su poder. Esta situación puede ser el resultado de luchas en el interior de la sociedad y/o de una derrota en conflictos armados con Estados extranjeros. Estas dificultades se combinan con la negativa de los dominados a continuar siéndolo.
• Amplia participación de la población: El descontento o el rechazo al orden vigente se manifiesta en la participación de un sector amplio de la población, que apoya o se involucra directamente en el movimiento social que provoca la destrucción de dicho orden. Esta participación se produce liderada por algunos individuos con capacidad de mando y de organización de los grupos revolucionarios.
• Violencia: En toda revolución se ejerce algún tipo de violencia, tanto de parte de los grupos que actúan contra el orden como de los que lo defienden.
• Sustitución de las autoridades: Las acciones culminan con la destitución de las autoridades del viejo orden, y su reemplazo por otras, provenientes de los grupos revolucionarios.
• Capacidad para ejercer el poder: Una vez que son reemplazadas las autoridades cuestionadas, los revolucionarios poseen los recursos para imponerse definitivamente sobre fuerzas que se les oponen.
• Construcción de un nuevo orden: Los revolucionarios triunfantes emprenden la transformación de los aspectos centrales de la sociedad y, mediante profundos cambios económicos, políticos y sociales, inician la construcción de un nuevo orden social.
Diferentes tipos de movimientos sociales
Revueltas, rebeliones y revoluciones constituyen tipos de movimientos colectivos desarrollados por los sectores subalternos en una sociedad.
Las revueltas poseen escasa organización, son esporádicas, espontáneas y de corta duración, ocupan un área reducida del territorio y se extinguen cuando las reclamaciones puntuales que efectúan sus líderes son satisfechas, o bien, cuando las fuerzas del orden proceden a la represión violenta.
Revolución húngara, octubre de 1976, contra tropas soviéticas. |
Las rebeliones, en cambio, poseen un nivel mayor de organización y se prolongan en el tiempo, pudiendo integrar las reclamaciones y demandas de diferentes sectores. En éstas, el ejercicio de la violencia par parte de los rebeldes es mucho más amplio, al igual que los alcances de la represión. Cuando logran triunfar, obtienen algunas modificaciones parciales en el orden social, que satisfacen las demandas, aunque no significan cambios en sus aspectos centrales.
En otras ocasiones, el objetivo de las acciones es un cambio de los elementos esenciales que hacen posible que el orden se mantenga y se reproduzca, es decir, se propone un cambio de orden. Se cuestione quién domina y por qué o qué se produce, cómo y para el beneficio de quién, etc. En este caso, si las acciones son exitosas llevan a la destrucción del orden social vigente y al comienzo de la construcción de uno nuevo, sobre otras bases. Éstas son las que los investigadores denominan revoluciones.
En la historiografía se habla generalmente de tres tipos de revoluciones
• revolución política
• revolución social
• revolución económica
Revolución bolchevique, 1917. |
Pueden valer para ejemplificarlas las tres grandes revoluciones que surgen y se desarrollan entre los siglos XVIII y XIX, marcando el fin de la Edad Moderna y el comienzo de la Edad Contemporánea.
• La Revolución Francesa fue un movimiento fundamentalmente político, porque se trataba de sustituir la monarquía absoluta existente hasta 1789, para reemplazarlo por un sistema político con características radicalmente opuestas, lo que permitió hablar de un Antiguo Régimen y un Nuevo Régimen.
Desde un punto de vista general, puede incluirse la francesa entre las Revoluciones Liberales, entendidas como las que aplican la ideología política liberal, y que habrían comenzado con la independencia americana y continuarían en Europa occidental al menos hasta 1848.
• La revolución burguesa entendida como la sustitución como clase dominante del estamento privilegiado (formado por nobleza y clero) por la burguesía, con el cambio de relaciones, comportamientos, actitudes y valores sociales que se identifican con una u otra; permite hablar de una nueva sociedad de clases. No obstante, la historiografía suele utilizar más comúnmente el término Revoluciones burguesas para referirse, incluso en su aspecto estrictamente político (a pesar de la impropiedad), a las que hemos llamado revoluciones liberales, es decir, a todos los procesos revolucionarios (como la misma Revolución Francesa) en los que esta clase social es impulsora.
• La Revolución Industrial tiene un carácter esencialmente económico, la transformación respecto de la época precedente (la preindustrial) con el uso de nuevas técnicas, fuentes de energía, invención de maquinarias, innovadores medios de transporte, aumento de la capacidad productiva con la sustitución de los talleres artesanales por las fábricas, etcétera.
Pancho Villa, figura en la revolución mexicana. |
Es necesario indicar que estos dos últimos procesos, pese a ser de duración secular, fueron claramente percibidos por sus contemporáneos como súbitos y violentos, como lo prueban, entre otros extremos, la resistencia y los conflictos que generó la aparición del maquinismo (la destrucción de máquinas o luddismo). Es de imposible solución el debate sobre si la revolución industrial inglesa costó más muertes y sufrimientos que la revolución liberal francesa.
Justificado este uso, se entiende que por extensión se aplique el término revolución a la Revolución Neolítica y la Revolución Urbana, procesos ya no seculares sino milenarios, pero que presentan claras analogías con los del XVIII y XIX en cuanto a la transformación radical (y sin duda violenta) de las formas de vida de la humanidad.
No se agota la tipología de las revoluciones con estos tres tipos. Se habla de revoluciones en cualquier ámbito, incluso en los más alejados de los usos anteriores, como sería el ámbito de la ideología (revolución ideológica) o el del arte (revolución artística). A veces esa extensión se hace con evidente abuso del término (cuando se aplica a la moda, al deporte, a la última novedad de la música popular...), y a veces está plenamente justificada (revolución cultural en la China maoísta ) o el concepto de revolución científica (Thomas Kuhn).
Fuentes Internet:
http://www.portalplanetasedna.com.ar/revolucion.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Revoluci%C3%B3n