Minería |
En términos generales, la minería constituye una actividad económica que requiere de poca mano de obra, siendo intensiva en el uso de capital. En relación a la agricultura, industrias o servicios, la actividad minera tampoco es una gran generadora de ingresos directos.
Sin embargo, los antecedentes señalados en ningún caso pretenden subestimar el rol extremadamente significativo que cumple este tipo de actividades en la economía mundial, y en el caso de Chile, su importancia ha sido fundamental a través de toda su historia.
El primer intento en extraer minerales de la tierra fue realizado por gente prehistórica que excavó hoyos y túneles para colectar minerales que fueron utilizados para crear pigmentos como también para hacer herramientas y armas.
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| Hoy, con modernos túneles. |
La minería de estaño y cobre tomó lugar alrededor del 3500 A.C. Para construir las grandes y monumentales pirámides de Egipto, la piedra fue extraído. Otras antiguas civilizaciones como los Romanos se dieron cuenta de la riqueza en la producción de minerales y por consiguiente ocuparon las minas de plata, oro, y plomo de las naciones que conquistaron.
Después de la división del Imperio Romano en 400 D.C., durante los siguientes mil años, los avances en minería fueron lentos y hasta no existentes.
El precio que alcanzan los minerales en los mercados mundiales hoy en día constituye el reflejo de la percepción que el hombre posee de ellos, en términos de su utilidad para satisfacer determinadas necesidades, situación que depende de las propiedades físicas y químicas de los mismos.
Así, por ejemplo, el tipo de material que se utiliza en la construcción, como el granito o el limo, posee una gran resistencia a las fuerzas de compresión, pero muy poca resistencia a las tensiones.
Algunos metales pueden soportar miles de toneladas de tensión por centímetro cuadrado. Esta propiedad, además de ventajas en cuanto a la resistencia a golpes y vibraciones, explica que el acero (elaborado a partir del hierro) constituya un material estructural de gran importancia. El concreto armado combina precisamente las propiedades de ambos materiales.
Con respecto al cobre y al aluminio, una propiedad esencial es la conducción eléctrica, elemento clave en toda sociedad industrial.
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| En las montañas, a gran altura. |
Por otra parte, el carácter no renovable de algunos minerales constituye una consideración central en la planificación contemporánea.Los minerales combustibles se consumen completamente luego de ser utilizados como fuente energética durante los procesos de transformación. Sin embargo, también existen algunos minerales metálicos que pueden ser reciclados.
Como sucede con otras formas de producción extractiva, la localización y las características de las empresas mineras se encuentran influidas por factores espaciales y ambientales que interactúan entre sí. Una reserva minera debe ser potencialmente rentable para mantener esa condición.
Los beneficios económicos que pueden derivarse de una reserva minera están relacionados con su accesibilidad (incluyendo su proximidad a los grandes mercados industriales) y con su calidad (referida al tamaño, forma, profundidad y ley del mineral).
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| El esfuerzo humano, siempre. |
Un aspecto importante se refiere a que el mismo yacimiento minero puede cambiar de reserva a no reserva, dependiendo de las modificaciones ocurridas en los costos de producción, costos de transporte y precios en los mercados.
Una caída en los costos de producción o un aumento en los precios contribuirá a aumentar el número de yacimientos conocidos que pueden ser considerados reservas. Al revés, un aumento en los costos, una caída en los precios o ambos puede significar una reducción en el número de reservas.
Los procesos de extracción y de refinamiento también dependen del costo de los insumos, la disponibilidad de la tecnología, el nivel de los impuestos, de los royalties y de las políticas gubernamentales, entre otros factores.
Algunos minerales, como la arena y la gravilla, presentan una ocurrencia más o menos generalizada en el planeta, pero otros como el níquel son escasos.
La presencia de los metales en la corteza terrestre normalmente se encuentra combinada con otros elementos, de los cuales deben ser separados, mientras que los minerales no metálicos habitualmente se mantienen en sus formas de extracción. Ésta es una importante razón para explicar por qué los precios de los metales son relativamente más altos que aquellos minerales no metálicos, característica que tiene una importante connotación en la comercialización. Los metales, luego de ser concentrados, pueden afrontar costos de transporte a mercados distantes, y no así los minerales que poseen un bajo costo unitario (arena, gravilla, arcilla, limos).
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| Monstruos mecánicos hacen la tarea. |
En otras palabras, los minerales no metálicos se comercializan esencialmente en los mercados locales y regionales mientras que los minerales metálicos se transan en los mercados internacionales, reconociendo que hay algunas excepciones, como los diamantes, que es un tipo especial de mineral no metálico.
Debido a que la producción de la mayoría de los yacimientos es utilizada en otros procesos productivos, la demanda y el precio de los minerales son altamente sensitivos al nivel de actividad industrial.
En consecuencia, la demanda agregada de los minerales tiende a tener un precio inelástico, lo que significa que un aumento o un descenso en los precios no implicará necesariamente una caída en la demanda.
Otra característica fundamental de la industria minera se relaciona con el control monopólico de que es objeto, el cual tiene una incidencia determinante en los precios.
Obviamente, existen algunos mercados más monopólicos que otros. El mercado de los diamantes es altamente monopólico, mientras que los mercados de metales como el plomo y el zinc son más competitivos.
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| Horadando las entrañas de la tierra. |
Una explicación adicional en cuanto al porqué la demanda no siempre sigue las señales de precios que emite el mercado, se refiere a que algunos minerales metálicos constituyen un producto obtenido de la extracción de otro mineral.
En Chile, por ejemplo, el oro y la plata son subproductos de la extracción de cobre, situación que se refleja en el hecho de que al aumentar la producción de este metal, también aumenta la de plata y oro.
Ver: Minería en Chile .
Al analizar los patrones espaciales de la producción minera, la localización de los mercados industriales se asume como fija. Esto significa que los yacimientos mineros se localizan teniendo como referencia los mercados, pero los consumidores de minerales rara vez se localizan cerca del lugar de extracción.
A través de la historia de la Tierra es posible encontrar muchos yacimientos mineros que se han desarrollado en regiones que carecen de ventajas comparativas para localizar otras actividades económicas. Normalmente se trata de regiones desérticas, de topografía accidentada, suelos agrícolas muy pobres o suelos permanentemente congelados (permafrost).
En efecto, la mayoría de los depósitos de minerales se localizan en áreas montañosas, de tal manera que los factores geológicos que permiten la presencia de concentraciones metálicas son por lo general poco aptos para la localización de otro tipo de actividades, siendo una de las pocas excepciones probables el turismo. En el caso chileno, estas condiciones se cumplen a cabalidad.
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| Chuquicamata |
Los asentamientos mineros emplazados en regiones remotas dependen muy estrechamente de la misma actividad como base económica única. Es así como las empresas mineras localizadas en dichas áreas deben proveer la totalidad de la infraestructura y equipamiento, tanto el relacionado con las operaciones productivas propiamente tales como con los servicios requeridos por las personas que en ellas trabajan.
La condición de recurso no renovable que poseen los minerales explica que se trate de una actividad económica limitada en el tiempo. Si no existe otra que la sustituya, la región donde se emplaza caerá irremediablemente en una gran depresión, que en su momento más crítico da origen a los pueblos fantasmas,tan característicos en el norte de Chile y, en general, en muchas regiones mineras del mundo.
La movilidad de las empresas mineras y de las personas que en ellas laboran constituye el testimonio del proceso descrito.
A medida que la actividad minera se desarrolla en el tiempo, las externalidades negativas se transforman en un factor de localización cada vez más importante. La contaminación ambiental, los quiebres ecológicos y otros procesos no deseados producidos por la actividad minera, representan algunas de las manifestaciones posibles.
En Chile, desde hace varios años existe un debate en relación a los efectos de la chimenea de Caletones (mineral El Teniente) en la contaminación atmosférica existente en Santiago, efecto que también se le atribuye a la refinería de Ventanas, con respecto a la V región. El efecto de las actividades mineras en la contaminación de las aguas subterráneas también constituye un hecho probado, que no sólo afecta a una población específica, sino que tiene un impacto ecológico negativo, que se reflejará en el mediano y largo plazo.
Ver: PSU. Historia, geografía y ciencias sociales.