Conocido también como león de montaña, el puma ( Felis concolor ) está protegido por la ley  en Chile, pero sigue siendo víctima de cazadores clandestinos que lo persiguen hasta sus ultimos reductos en la cordillera de los Andes.

Es un mamífero carnívoro que pertenece a la familia de los félidos. De cuerpo robusto y cabeza pequeña, de color pardo rojizo, con las mejillas blancas, su longuitud varía de acuerdo con las distintas zonas donde habita y fluctúa entre 1,40 y 2,40 metros.

Son animales de gran habilidad para trepar árboles o moverse entre los roqueríos y pueden correr muy rápidamente en cortas distancias. ( Ampliar imagen abajo ).

El puma vive en toda América y su ambiente natural es la selva y las áreas rocosas. En Chile se le encuentra a lo largo de toda la Cordillera de los Andes. En la zona central de Chile se ven raramente ejemplares en la Cordillera de la Costa.

La hembra, más pequeña que el macho, pare cada dos o tres años y es la cuidadora exclusiva de las crías, que llegan en número de uno a seis, despues de una gestación de 90 a 96 días.

Los cachorros nacen con la piel manchada, coloración que pierden a medida que crecen.

La madre cuida con gran solicitud a sus hijos durante un periodo de hasta dos años, en que los alimenta y les enseña a cazar. ( Ampliar imagen abajo ).

El hombre, su enemigo principal

En épocas pretéritas el puma contaba con abundancia de piezas naturales de caza, como los guanacos, huemules, vicuñas que existían en grandes cantidades en el territorio chileno. El puma cumplía el papel de regulador de esos animales.

En la actualidad esas antiguas presas del cazador de los Andes han sido casi exterminadas por el hombre, por lo que el puma frecuentemente se ve obligado a atacar al ganado. En esas circunstancias, es víctima de una guerra a muerte y su número ha sido considerablemente reducido en los últimos decenios.

A todo lo anterior, se suma el avance de los cultivos agrícolas, de la ganadería y de la explotación de la madera en áreas donde este felino reinaba antes en forma solitaria. Su espacio vital se ha reducido casi al mínimo. ( Ampliar imagen abajo ).