Simón González proviene de una familia de destacados artistas, como es el caso del pintor Juan Francisco González, su hermano.

En 1878 ingresó a la Academia de Bellas Artes de Santiago, donde se distinguió como alumno de Nicanor Plaza. Pertenece a la Generación Académica de fines del siglo XIX (la segunda generación), integrada por Virginio Arias, Rebeca Matte, Guillermo Córdova y Ernesto Concha , entre otros.

En 1887 fue becado por el gobierno para continuar sus estudios en Francia, y tres años después, en 1890, estudió en la Escuela de Bellas Artes con el maestro Jean Antoine Injalbert , permaneciendo en París hasta 1891 año en que debió suspender la pensión por motivo de la Revolución. Estuvo viviendo en París por casi dos décadas y participando en las grandes exposiciones en Chile y en el extranjero, obteniendo importantes distinciones. Simón González logró imponer su talento tras un arduo trabajo.

En 1906 regresó a Chile, para dedicarse a la docencia en la Escuela de Bellas Artes, cargo que desempeñó hasta su fallecimiento.

En sus obras, la mayoría ejecutadas en mármol, Simón González introduce el realismo social y trata con especial sentimiento las representaciones de niños. También realizó pequeñas esculturas con la técnica del bronce a la cera perdida, en un formato más pequeño, al contrario de otros escultores de su época, académicos como él, que preferían los volúmenes de grandes dimensiones.

Su estilo enlaza el academicismo en decadencia con las nacientes vanguardias, colaborando en alguna medida en la renovación del arte chileno. González prescinde de los motivos alegóricos, religiosos y mitológicos que son propios del academicismo para introducir los motivos simples que derivarían en el realismo social que fue una corriente frecuente en las primeras décadas del siglo XX. Él introdujo en la escultura chilena dos aspectos relevantes: primero, el realismo de tinte social y, segundo, cierta fuerza expresiva y dramática que se imponía por sobre las normas académicas de modelado del volumen. González revaloró los efectos de la luz sobre los cuerpos, el movimiento de la materia y la sugerencia de las formas ocultas, todo especialmente después de tomar contacto con la obra de Rodin .

En 1891 recibió la Medalla de Oro en el Salón de París por su obra "El Mendigo", y en 1893, un reconocimiento, en el mismo certamen, por su obra "El Niño taimado"; obtuvo otras medallas en salones de Francia, España, Estados Unidos, Argentina y Chile.

Premios:

1891 Medalla de Oro, Salón Oficial de París, Francia.

1893 Mención Honrosa, Salón Oficial de París, Francia.

1894 Primer Premio, Concurso para adornar la tumba del Senador Tenay Saligny, París.

1898 Medalla de Bronce, Exposición de Bellas Artes e Industrias Artísticas, Barcelona, España.

1900 Medalla de Oro, Exposición Universal de París.

1901 Medalla de Plata, Exposición de Buffalo, Estados Unidos.

1905 Primera Medalla, Salón Oficial, Santiago, Chile.

1905 Premio General Maturana, Salón Oficial, Santiago.

1905 Medalla de Honor, Salón Oficial, Santiago.

1905 Premio de Honor, Certamen Edwards, Salón Oficial, Santiago.

1910 Primera Medalla, Exposición del Centenario, Buenos Aires, Argentina.

Exposiciones colectivas en que participó:

1891 Salón de París, Francia.

1893 Salón de París, Francia.

1898 Exposición de Bellas Artes e Industrias Artísticas, Barcelona, España.

1900 Exposición Universal de París, Francia.

1901 Exposición Internacional de Buffalo, Estados Unidos.

1905 Salón Oficial, Santiago.

1910 Exposición del Centenario, Buenos Aires, Argentina.

1910 Exposición Internacional de Bellas Artes, Museo Nacional de Bellas Artes, Santiago.

2000 Chile Cien Años Artes Visuales: Primer Período (1900-1950)

Obras en el Museo Nacional de Bellas Artes

"El Niño taimado", 1885, mármol, 114 cm alto. González ganó la medalla de bronce con esta obra en la exposición de Barcelona en 1898.

"El Escultor Desca", 1902, bronce, 54 cm alto.

"El Mendigo", 1903, bronce, 76 cm alto.