Pregunta 12_2006(2)

El ácido clorhídrico presente en el estómago es

I. activador de un zimógeno o proenzima.

II. una barrera innata de defensa.

III. un estímulo para la secreción de gastrina.

Alternativas

A) Sólo I
B) Sólo II
C) Sólo III
D) Sólo I y II
E) I, II y III

Contenido: Digestión.

Eje temático: Procesos y Funciones Vitales.

Curso: Primero Medio.

Clave: D.

Dificultad: Media.

Comentario

El ácido clorhídrico (HCl) es sintetizado por las células parietales de las glándulas tubulares que se encuentran poblando la mucosa oxíntica o del estómago proximal, la que se encuentra más cerca del esfínter gastro-esofágico que del esfínter pilórico .

Corresponde a más o menos el 80 por ciento del total de la mucosa gástrica y anatómicamente comprende al fundus gástrico más el tercio proximal del cuerpo gástrico . El cuerpo gástrico corresponde a la porción central más extensa de la mucosa gástrica, donde su primer tercio corresponde al área proximal u oxíntica y los 2/3 restantes, más el área antral , corresponde a la del estómago distal .

Sólo en el área oxíntica se encuentran las glándulas que tienen células parietales secretoras de ácido clorhídrico, por lo tanto, éste sólo se secreta en el estómago proximal .

Este ácido se mezcla con la secreción de las células principales que secretan pepsinógeno , que corresponde a la proenzima de la pepsina que es la forma inactiva de esta enzima proteolítica. La molécula inactiva de pepsina se activa en presencia del HCl y en esas circunstancias se inicia la digestión de proteínas.

Por otro lado, el HCl además permite la denaturación de las proteínas ingeridas, lo que facilita la proteólisis por la pepsina gástrica.

El jugo gástrico tiene un pH = 2,0 (muy ácido) que es intolerable para muchos microorganismos. Pero tal como es un mecanismo efectivo para la destrucción de algunos microorganismos patógenos que pudieran entrar con la dieta y provocar infecciones, puede ser también dañino para la integridad de la mucosa gástrica. Sin embargo, la mucosa gástrica se defiende permanentemente de la excesiva producción del ácido, estableciendo una barrera protectora eficiente, que impide que el ácido la dañe.

Por otro lado, la gastrina es una hormona gastrointestinal sintetizada y secretada por las células G de la mucosa antral y duodenal. La célula G, cuando está en contacto directo con el HCl en el antro o lumen duodenal, inhibe la secreción de gastrina. Existe por lo tanto un mecanismo de autorregulación de las secreciones de HCl y gastrina, manteniéndose ambos en niveles plasmáticos autorregulados.

Con respecto a la pregunta, la proposición I es correcta, por su efecto activador del zimógeno pepsinógeno secretado por las células principales. La proposición II es correcta si, como se dijo antes, se crea un ambiente muy ácido, que no sea propicio para que se desarrollen colonias que provoquen alguna enfermedad; pero no hay que olvidar que la acidez en sí es un poderoso estímulo, que de no ser por la barrera protectora de la mucosa gástrica provocaría graves inflamaciones de la mucosa (gastritis) que son causa de úlceras y otros trastornos graves de la integridad de la mucosa.

Por lo tanto, si pensamos en que la barrera de mucosa tiene intactos sus mecanismos protectores, sería correcto pensar que es beneficioso crear un ambiente ácido protector que impide la proliferación de microorganismos patógenos.

Por último, en la proposición III, se pregunta por el efecto del HCl sobre la secreción de gastrina.

Como ya se discutió anteriormente, el HCl no estimula la secreción de gastrina, sino que la inhibe.

Los estadísticos resultantes de esta pregunta indican que la omitió el 36 por ciento de los estudiantes, lo que demuestra un alto nivel de desconocimiento frente a este contenido, y sólo la contestó correctamente el 13 por ciento de la población testeada.  Esta pregunta se consideraba inicialmente como de mediana dificultad, pero los resultados demuestran que no es un contenido sencillo para los postulantes.

Fuente Internet:

Publicación oficial del Demre en www.demre.cl