Sorpresa (o Desastre) de Curalaba

Acción de guerra que se desarrolló en el lugar llamado Curalaba (37º 55' latitud  Sur y 72º 53' longitud Oeste), el 23 de diciembre de 1598, en las orillas del río Lumaco a 25 kilómetros de la ciudad de Angol.

En ella fue muerto el gobernador de Chile Martín García Óñez de Loyola, quien comandaba la tropa al ser atacados por los indios del cacique araucano Pelantaro.

Martín Garcia Óñez de Loyola

Óñez de Loyola se dirigía desde Imperial a Angol, llevando 50 españoles y 300 indios auxiliares. Después de dos días de viaje pernoctó en una loma llamada Curalaba, sin siguiera vigilar los alrededores. Se dedicaron solamente a descansar y dormir. Los indios los habían seguido y vigilaban cada uno de sus pasos.

Al verlos desprevenidos, los indios decidieron atacarlos por sorpresa el amanecer del 23 de diciembre de 1598.

Dividieron los indios sus  fuerzas en tres escuadrones al mando de los caciques Pelantaro, Anganamon y Guaiquimilla. Amparados por la oscuridad de la noche se acercaron y a las primeras luces del alba cayeron sobre los españoles, dando muerte a todos ellos y a los indios auxiliares, los cuales aterrorizados en el desconcierto se despeñaron hacia el río.

Sólo se salvó el clérigo Bartolomé Pérez, quien quedó en el campo de batalla dado por muerto. Después de setenta días Pérez,  casi a punto de desfallecer, pudo llegar a Imperial.